Con motivo de la conmemoración del Bicentenario de la toma de Mequinenza por parte de las tropas del General Louis-Gabriel Suchet, se han programado una serie de actos que incluyen una Recreación Histórica de los hechos. Los actos se realizarán el 12 de Junio en la localidad aragonesa e incluyen un desfile por la población y una Recreación de la batalla sobre el terreno original de la misma.
No fue ésta la primera vez que Francia intentaba la toma de Mequinenza. Ya en Marzo de 1809 Mortier salió de Fraga con la intención de conquistarla, pero le fue imposible por las propias características de la Fortaleza y la encarnizada defensa que se hizo de ella, contentándose con acampar en sus cercanías, observarla y mantener algunas escaramuzas por la zona hasta que finalmente recibió órdenes de retirarse a Zaragoza.
Hay que destacar que la Fortaleza de Mequinenza no consiste únicamente en el visible y altivo Castillo que domina la población, si no que incluye toda una serie de murallas y baluartes que la rodean, amén de las propias características del terreno, con una pronunciada pendiente sobre el pueblo viejo que la hace inexpugnable por ese lado, además de una muralla que descendía por dicha pendiente y que abrazaba el pueblo viejo, ahora destruído desde la construcción del pantano que lleva su nombre.
Un año más tarde el todavía General Suchet se acercará a Mequinenza tras la toma de Lérida, pero la situación en la Fortaleza no es la misma que la del año anterior. 1.500 hombres de varios regimientos y con la moral baja por las noticias de los éxitos del enemigo. Completan el cuadro 40 piezas de artillería y un servicio médico que, según el cirujano, «lo único que tiene son enfermos». El 19 de Mayo Suchet y Musnier llegan ante Mequinenza, comenzando su asedio el 21 de Mayo. El 28 el cerco se ha cerrado y el 31 llega el tren de artillería.
Louis-Gabriel Suchet, de Jean-Baptiste Paulin Guérin
Los defensores realizan heróicas salidas de reconocimiento, buscando la destrucción de los aproches franceses, pero es inútil. El enemigo sigue aproximándose y desalojando a los defensores de sus puestos. Mientras, en el pueblo, el Tercer Batallón del Regimiento América logra rechazar tras varias horas de combates a los asaltantes polacos. El 4 de Junio los cañones franceses comienzan su colocación en las baterías y el 5 se toman las primeras casas de la Villa, lo que hace que los españoles se refugien en el Castillo. El día 8 de Junio los cañones franceses comienzan a escupir fuego sobre el Castillo de forma demoledora. Tan demoledora que a las 9 de la mañana la artillería de la Fortaleza deja de responder a los disparos del enemigo y el caos y destrozo más absoluto reinan en el Castillo. A las 10:00, la bandera blanca es izada. Como muestra de respeto a los defensores, se permite que éstos desfilen delante de las tropas francesas para rendir sus armas antes de partir presos hacia Francia.
Vista del recinto de la Fortaleza desde el pueblo viejo.
Según Casamayor, cronista de Zaragoza, la noticia llega en posta a la ciudad del Ebro el día 9 de Junio mientras el Obispo celebraba maitines y, textualmente, «… celebraron los apasionados de los franceses echando los bonetes y haciendo otras demostraciones de alegría incluso dentro del coro, e inmediatamente se mandaron echar las campanas al vuelo y se tiraron varios cañonazos.»
Tan importante era para los franceses tomar ésta plaza y controlar su zona que el nombre de Mequinenza figura entre las grandes victorias imperiales en el pilar sur del Arco del Triunfo de Paris.
Patio interior del Castillo
La fortaleza permaneció en manos francesas hasta el 13 de Febrero de 1814. Y es recuperada para España sin disparar ni un sólo tiro gracias a una elaborada estrategia urdida por el Baron de Eroles y con la participación del ambiguo Juan Van Halen. Perteneciente al Fondo de la Biblioteca Central Militar (Madrid), y accesible a traves de la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes, se puede consultar un interesante documento firmado por «Un patriota de la provincia de Cataluña», que bien podría ser el mismo Baron de Eroles, en el que se detalla la estrategia y el modo utilizados en la reconquista de Mequinenza. Pueden acceder al mismo pinchando aquí. Como hemos dicho, la artimaña fue un éxito y la guarnición francesa abandonó el Castillo el 13 de Febrero de 1814.
Anuncio de la reconquista de Mequinenza y Lérida